Día Mundial de la Sociedad de la Información


Hoy, 17 de mayo, se celebra –por iniciativa de la ONU en 2006- el Día Mundial de la Sociedad de la Información. Y creo que es interesante reflexionar un poco al respecto de los avances y los alcances que ha tenido la información en todos los aspectos de la vida de las comunidades en general y de cada individuo en particular en los últimos… digamos, treinta años.
Sin embargo, lo más sustancial de este proceso se está gestando en el último lustro (aproximadamente), en los que el crecimiento de las comunicaciones por telefonía celular y por Internet ha producido una verdadera revolución en las costumbres de las personas –las que tienen acceso a esos medios, lógicamente-. Hoy, para mucha gente ya se ha transformado en “inviable” una vida a la vieja usanza, sin comunicarse telefónicamente desde cualquier lugar, sin chatear con gente de cualquier sitio del mundo, sin navegar por Internet y por la blogósfera, sin recibir y enviar mensajes de texto, correos electrónicos, fotos, videos, etc., etc.
Por si esto fuera poco, en estos tiempos, los individuos han dejado de ser sujetos cuasi-pasivos en el proceso de la comunicación social (solo “los medios” comunicaban hasta hace unos pocos años y los ciudadanos eran consumidores de ello, a no ser por una mera carta de lectores o un llamado a una radio…), y pueden tener sus propios medios de expresión, como éste que usted está leyendo.
Aún este nuevo proceso es un germen, pero estoy seguro de que podría verdaderamente cambiar el mundo en un futuro, empezando a derribar viejas prácticas derivadas de otros momentos históricos, aggiornándolas a los nuevos tiempos. Aludo específicamente a las formas representativas de gobierno (¿representativas…?), que van perdiendo cada vez más su sustento a partir de la facilidad de expresión que hoy otorgan las herramientas de que se dispone y que permitirían hacer conocer la auténtica opinión de los ciudadanos en vez de que unos cuantos detenten la potestad del criterio de los demás.
Sin embargo, este proceso parece ser inversamente proporcional al de la Educación formal. Creo que estamos asistiendo a una verdadera paradoja con nuestros jóvenes, adolescentes y niños, que se manejan “como peces en el agua” en la utilización de las nuevas tecnologías de la información, demostrando capacidades dignas de la admiración de muchos mayores, que observan perplejos cómo “navegan” los muchachos en los mares de la información. Capaces de generar páginas de Internet, blogs, presentaciones, videos, música y casi cualquier cosa de forma electrónica. Pero que, sin embargo, a la hora de mostrar sus conocimientos en materias básicas para el desarrollo personal de un individuo, dejan que desear en la mayoría de los casos. Me refiero a que no son pocos los jóvenes y adolescentes que no saben leer de manera fluida, mucho menos escribir de forma correcta –pésima ortografía, construcciones gramaticales horrorosas y hasta desorden en la forma en que se vierten las ideas en un escrito-, no tienen conocimientos acabados de Matemática, de Geografía, de Biología, de Historia y mucho menos saben relacionar las distintas disciplinas entre sí.
De pronto parece que empiezan a nacer generaciones que pueden utilizar herramientas sofisticadas (de hecho deben hacerlo para no quedar discriminados del entorno) para comunicarse y llevar adelante la gestión diaria de vivir, pero no tienen las cogniciones mínimas necesarias para manejarse de manera adecuada a lo largo de la vida. Me parece irresponsable que una adolescente pueda tener su propia página personal para contar intimidades y describir en ella que “ha beses” las cosas son de determinada forma. Sí, “ha beses”, leyó bien… Todos tenemos hijos, parientes y conocidos en esas edades y sabemos de las falencias de las que estoy hablando.
Seguramente, esa irresponsabilidad no es de quien ejerce la falta de Educación o aprendizaje, como no la es la de los chicos que reprueban en masa un examen de entrada a la Universidad, algo que se convirtió ya en moneda corriente. La Sociedad, los padres, los educadores, las políticas de Estado estamos generando “tecnócratas ignorantes” que en algún momento tendrán que manejar sus propias vidas y las de las naciones. ¿Cómo será aquello?
Quizás “el poder” del mundo se protege “del poder” que las nuevas herramientas pueden ofrecer a la gente, otorgándole una educación deficiente. O quizás me esté haciendo la película, pero todo coincide sugestivamente. ¿Vos qué opinás…?

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Opino que no te hacés la película, coincido con vos, creo que a "el poder" le conviene tener "tecnócratas ignorantes", bastaría una sola persona que comprendiera para que formara el primer eslabón hacia una sociedad inteligente y capaz,bastaría una nota como ésta para recapacitar y entender que necesitamos dar a nuestra juventud bases elementales para que no se repitan los "ha beses".Vos podrías ser esa persona, de hecho creo que ya lo sos.Vos qué opinás?

Alejandro FIGUEROA dijo...

Gracias por el comentario. Opino que ojalá yo y esta nota pudiéramos convertirnos en el eslabón que decís. No esquivo el compromiso, pero creo que es una tendencia a revertir entre muchos. Lo bueno es que se vaya entendiendo...

Saludos.

Anónimo dijo...

Los tiempos que vivimos exigen, de nosotros, un poder de adaptación al medio. Las comunicaciones alcanzaron un desarrollo impensado. El tiempo transcurrido desde el invento de la impresora de Gutemberg resulta poco para la raza humana, la constante adaptabilidad colapsó, son tantas las premisas que debemos legar.
40 años atrás nuestros padres tenían otras, las relaciones humanas, no era tan importante las materias que daban en las escuelas, se priorizaba en el tipo de vínculos que realizaban, se asistía a las reuniones de padres de las escuelas, para poder profundizar con los modelos de éxito impuestos por los medios.
Hoy tenemos un mercado competitivo con Internet, nuestros hijos deben pasar con mayor facilidad los escollos que encontramos nosotros, las premisas cambiaron, necesitamos acceso desde pre-escolar, no importa el conocimiento previo, eso podrá ser un problema mañana, y el resultado es chicos alienados en relaciones semi autistas, en pos del bien futuro, nos olvidamos de las cosas que nos hacían felices. Todo se paga, lo dramático en relacionarse con un medio voluble, que está en pleno cambio, que se desarrolla y evoluciona a situaciones impensadas, o no imaginables. Recibiendo toda la información de los problemas, cuando ya se instalaron en casa.
No olvidemos lo importante por cubrir lo emergente.